El desahucio es la acción legal por la que se expulsa a la persona, que ocupa o tiene arrendada una vivienda o un terreno.

El objeto del juicio de desahucio será la recuperación de la propiedad que se tiene arrendada.

¿Qué tipos de desahucio existen?

Hay dos tipos de desahucio:

• Desahucio por falta de pago de las rentas o cantidades asimiladas.
• Desahucio por terminación de contrato o por precario.

En el primer caso, antes de interponer la correspondiente demanda, es conveniente que el propietario requiera fehacientemente al inquilino el pago, de lo contrario éste podría enervar la acción, esto quiere decir que podría pagar las cantidades debidas y el contrato continuaría vigente.

En el segundo caso, también es conveniente avisar al inquilino de manera fehaciente, y con suficiente antelación, de su  intención de no renovar el contrato de arrendamiento, pues de lo contrario, se podría estar incumpliendo alguna de las cláusulas del mismo, y daría lugar a su prórroga.

Una vez efectuado el requerimiento, sin que el inquilino lo atienda,  ya es el momento de  interponer la correspondiente demanda, que debe ir con la firma de Abogado y Procurador, y a partir de la presentación de la misma comienza la tramitación del procedimiento de desahucio ante el Juzgado.

Si te encuentras en alguna de estas dos situaciones, no dudes en ponerte en contacto con nuestros profesionales, que estarán encantados de atenderte.

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